SINOPSIS



Esta nueva entrega de la saga protagonizada por Ginés Pintado nos introduce en una historia de venganza y corrupción. Elena Carrión –la particular Moriarty de Ginés- hace de nuevo irrupción en escena para desquitarse de su obligada salida de escena en la novela anterior.

Pintado persigue el rastro de su ex mujer desaparecida en Buenos Aires, por Argentina, Bolivia y Perú. Lo inesperado se hace presente cuando la Organización que dirige el magnate Ricardo Sanmartín le obliga a planear un atentado contra un viejo amigo y colega, ahora Ministro del Gobierno argentino.

Una trama ambientada en la Latinoamérica gobernada por las grandes fortunas en la que dos siglos después las familias patricias que protagonizaron la independencia de la metrópolis siguen ostentando el poder. Ahora no sólo ejercen el dominio político y económico, más allá de la corrupción, son los señores del tráfico de drogas y la trata de blancas, con las que se complementan los ingresos de las corporaciones familiares.

La sombra del Cisne Negro es una historia donde la maldad destila la suficiencia del poder y donde la razón no es arma bastante para limitar el daño que aquella produce. Una historia en la que el amor ha dejado su sitio a la soledad permanente del héroe.


domingo, 5 de febrero de 2017

EL DIA DE LA MARMOTA BOLIVARIANA. VUELVA USTED DENTRO DE QUINCE DIAS…


Como en la película de culto de Harold Ramis “El día de la Marmota (Atrapado en el tiempo)”, miles de venezolanos viven su particular vivencia a la hora de renovar sus documentos de identidad. Y como Bill Murray –el protagonista- reviven, semana tras semana, la misma escena que el periodista revive a diario en el pueblecito de Punxstawnwey dónde acudió a cubrir la aparición del roedor Phil…
En la Venezuela de hoy resulta prácticamente imposible renovar la cédula (carnet de identidad) o el pasaporte. Sólo recurriendo a terceros bien relacionados, llámese funcionario del aparato del estado, burócrata del SAIME o del Ejército, pueden obtenerse los citados documentos al módico precio de 500 dólares al cambio, sin que ello implique seguridad alguna de recibirlos.
Lo que cuento no es ningún chisme, le ocurre a miles de ciudadanos y lo he sabido de primera mano, seguro que usted, si es que vive acá puede corroborarlo. Si alguien armado de paciencia e inocente corrección demócrata accede a una oficina del SAIME a reclamar su carnet o solicitar la renovación del pasaporte obtiene un lacónico. “Vuelva dentro de quince días”… Y así en repetición de un particular día de la marmota bolivariana.
Sin embargo estas semanas Maduro publicita el "Carnet de la Patria", un documento de identidad electrónico que regulará el acceso a alimentos y artículos de primera necesidad adquiridos en los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP).
El presidente de la República hizo un llamado al fortalecimiento de los Clap como el instrumento ideal para concretar en 2017 la recuperación de la economía: "Hay que fortalecer los Clap y el proceso de carnetización; debe haber puntos de inscripción para el Carnet de la Patria en todos los estados y así derribar los muros de la guerra económica y encaminarnos a la recuperación". Maduro además insiste en la importancia de que todo el pueblo asista al proceso de carnetización,  porque "es la única forma de medir los alcances de la revolución" y llegar hasta donde, por ahora, les ha sido difícil concretar los cambios.
Estamos buenos, igual hasta me tengo que hacer revolucionario para acceder a los alimentos básicos…

Y sobre todo no sean ingenuos, detrás de todo esto, el Totalitarismo, el aparato del Estado intentando frenar la sangría de venezolanos que abandonan el país porque no les queda otra, el control a ultranza, los puentes dinamitados para que nadie detrás acceda o salga de la zona de guerra... En cualquier caso un atentado contra la libertad del individuo.

A la vista de todo esto, Señor Zapatero,  ¿sigue usted siendo optimista?

No hay comentarios:

Publicar un comentario